El crimen organizado ha paralizado la ciudad de Taxco de Alarcón, en el Estado de Guerrero. Por las amenazas que ha lanzado las agrupaciones criminales La Familia Michoacana y Los Tlacos a los pobladores, principalmente a los trabajadores del transporte público, el municipio se ha vuelto un lugar fantasma esta semana.
Los transportistas han suspendido los servicios por falta de seguridad, las clases en los colegios se han cancelado y gran parte de los comercios han optado por no abrir sus puertas. Las imágenes de las calles vacías en esta ciudad turísticas se han mezclado en las redes sociales con videos de los grupos de la delincuencia organizada paseándose por ellas con armas en las manos.
El Gobierno municipal ha asegurado en un comunicado este lunes que había una “psicosis y zozobra” generada por “mala información” en redes sociales, aunque ha admitido que están trabajando para reforzar la seguridad.
El problema de la inseguridad en Taxco escaló el sábado por la noche, cuando asesinaron a balazos a un chofer de un transporte público e hirieron a una pasajera. Los medios locales reportaron que el ataque había sido perpetrado por un grupo de hombres armados.
El homicidio decantó en una huelga de los trabajadores que decidieron cortar con los servicios a partir del domingo. Acusaban extorsiones y violencia por parte de grupos del crimen organizado. Tanto La Familia Michoacana como los Tlacos han estado asediando a la población en esa zona de Guerrero. El mismo problema enfrentan los conductores y taxistas en Acapulco, donde ya acumulan un puñado de asesinatos en lo que va de este año y servicio no funciona en su totalidad como protesta a la inseguridad.
