El presidente de Colombia, Gustavo Petro,
ha promulgado una trascendental ley que prohíbe categóricamente el empleo de
animales por parte de la Fuerza Pública en contextos de protestas, motines y
eventos de violencia en masa. La medida, enmendando el artículo 166 del Código
de Seguridad y Convivencia, establece una clara demarcación entre el uso de
animales y el empleo de la fuerza en tales circunstancias. El propósito
subyacente es asegurar el bienestar y la integridad de los animales
involucrados en tareas con la Policía y las Fuerzas Militares, orientando su
participación exclusivamente hacia labores de vigilancia, prevención y control
en contextos específicos.
La legislación, firmemente respaldada por
el presidente Petro, reafirma un compromiso inquebrantable con la protección de
los derechos animales. La disposición no solo limita la participación animal en
situaciones potencialmente peligrosas, sino que también insta a la creación de
un programa de bienestar integral para estos valiosos colaboradores. Este
innovador programa comprende desde el cuidado constante de los animales hasta
su adopción responsable y la garantía de un entorno adecuado una vez que se retiren
de su servicio activo.
La implementación de esta ley resalta el
cambio de paradigma hacia una aplicación más ética y compasiva de la fuerza
pública, en armonía con el bienestar animal y la conciencia social. Colombia,
al liderar esta iniciativa, da un paso significativo hacia la construcción de
un futuro donde la seguridad y el respeto hacia todas las formas de vida
convergen en un solo camino de progreso.