Aquiles Álvarez, alcalde de Guayaquil, ha expuesto en detalle las deficiencias en la gestión de las entidades municipales en su último informe sobre el estado de la Alcaldía al asumir el cargo.
Comenzando con la Empresa Pública Municipal de Turismo, Álvarez señaló que esta entidad tenía un historial de asignar eventos de manera repetida a los mismos beneficiarios, con un asombroso 79% de contratos adjudicados a través de selección directa. Además, resaltó promesas incumplidas, como un concurso de monigotes que nunca se materializó. Además, reveló que a pesar de un presupuesto asignado de $4.8 millones, solo se encontraron $480,000 en efectivo, junto con cuentas por cobrar pendientes por tasas por un valor superior a $1.5 millones.
Al hablar sobre la Empresa Pública Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Guayaquil (Emapag), el alcalde expresó su decepción por la falta de cumplimiento de las promesas hechas a la comunidad, así como una preocupante deuda de aproximadamente $9.5 millones y múltiples retrasos en proyectos cruciales.
Además, señaló desafíos en la Autoridad Portuaria de Guayaquil, donde encontraron obras contratadas por $25 millones con problemas de diseño y falta de coordinación adecuada.
En otros sectores, Álvarez describió dificultades en el Registro de la Propiedad, la Autoridad de Tránsito Municipal de Guayaquil (ATM), la Administradora Municipal de Fondos y Fideicomisos S.A. (Admunifondos) y varias fundaciones municipales. Estos problemas abarcan cuestiones financieras y de gestión que requieren atención urgente.
En última instancia, el alcalde prometió un compromiso firme con una gestión responsable y eficiente de los recursos municipales en el futuro, asegurando a los ciudadanos que cada centavo que ingrese a las arcas municipales será invertido adecuadamente en su administración.