En la noche de este miércoles
10 de enero, la Asamblea Nacional, en segundo debate y definitivo, aprobó con
131 votos a favor el proyecto de Ley de Competitividad Energética, propuesto
por el gobierno de Daniel Noboa.
Tal normativa es el segundo
proyecto económico urgente que envió el presidente, en siete semanas de
administración. Fue enviado en el contexto de la actual crisis energética que
sufre el país, que provocó que existieran apagones diarios entre dos y cuatro
horas en Ecuador.
El lunes 8 de diciembre la
Comisión de Desarrollo Económico, presidida por la asambleísta Valentina
Centeno, representante del bloque oficialista de Acción Democrática Nacional
(ADN), realizó algunos cambios sobre el texto original, en relación con la
jerarquía de las empresas para las concesiones, participación de empresas estatales
extranjeras, e inversión privada para ampliar la cobertura de tendido
eléctrico, entre otros.
El proyecto prevé soluciones
económicas y de generación de energía, a través de la optimización del manejo
de los recursos públicos asociados al sector eléctrico en el ámbito público y
privado, con el propósito de superar la crisis energética, que ocasionó los
racionamientos en el servicio eléctrico.
Según la propuesta, los
contratos de inversión en el sector eléctrico que se suscriban con Ecuador
incluirán una cláusula de precios de compra de energía, que será determinada en
coordinación con el Ministerio rector de la energía y electricidad.
Además, la transmisión
eléctrica la realizará el Estado a través de la respectiva empresa pública; no
obstante, puede autorizar en primera instancia a empresas mixtas, donde el
Estado tenga participación mayoritaria y de forma excepcional la participación
de la empresa privada, estatal extranjera y de economía popular y solidaria,
para nuevos proyectos de transmisión.